Normas básicas para el niño que tiene móvil

Los profesionales de la medicina y la psicología coinciden en subrayar que es recomendable que los niños no tengan móvil hasta que cuenten por lo menos con 13 o 14 años. No obstante, por diversas circunstancias, hay padres que les compran a sus hijos teléfonos antes de esa edad. Adultos que, desde el primer momento, tienen que dejarles claras a los menores varias normas básicas que deben cumplir.

Es decir, se trata de reglas que deben respetar en todo momento pues, en caso contrario, se les retirará el smartphone. En concreto, estas son las más importantes al respecto:

Nada de móvil para ir al colegio

Salvo casos de extrema gravedad o circunstancias excepcionales que sean determinadas por los padres, el niño nunca debe llevarse el móvil al colegio. ¿Por qué? Porque tener ese terminal hará que no se concentre en las clases, que esté utilizándolo en cualquier momento y que incluso le pueda ser sustraído por algún alumno “avispado”.

Uso adecuado del smartphone

Los padres que regalen un teléfono a su hijo menor deben dejarle claro que tiene que hacer un uso correcto y adecuado del mismo. Eso supone que no lo emplee para mentir o para navegar por espacios que no corresponden a su edad. De la misma manera, esa utilización óptima también debe someterse a estas otras normas:

• Se evitarán llamadas a números que supongan un elevado coste.

• No se usará para acosar, insultar o agobiar a otras personas a través de distintas redes sociales o aplicaciones.

• No se empleará en ningún momento para formar parte de aplicaciones o chats que permitan conocer a extraños. Y es que esos espacios son muy peligrosos para los menores, ya que son muchos los pederastas que las utilizan para aprovecharse de los niños.

Nada de móvil en familia o en público

Otras de las normas básicas que se le debe dar a cualquier menor al entregarle un teléfono es que, bajo ningún concepto, lo utilizará cuando esté comiendo en la mesa con la familia, cuando se halle en público con más gente o cuando se encuentre en el cine o teatro. ¿Por qué? Porque emplearlo en esos momentos sólo es sinónimo de mala educación.

Otras reglas

Si importante son todas las normas citadas, no es menos vital que también se le dejen muy claras desde el principio otras reglas que, de no llevarlas a cabo, harán que se le retire el smartphone:

• Nada de hacerse fotografías o vídeos íntimos o en actitudes sexuales, aunque sea para enviárselas al “noviete” o “novieta” de turno. Y es que esos archivos pueden acabar circulando de un móvil a otro e incluso pueden llegar a manos de delincuentes.

• A la hora de ir a la cama el móvil se entregará a los padres. Esta es la manera de que el menor descanse y no le llegue de madrugada navegando por la Red o “wasapeando” con los amigos.

• Nada de descargarse aplicaciones o juegos por los que haya que pagar.